La voz dormida (2011)

La guerra civil ha terminado, pero no el dolor. Pepita es una joven andaluza que se desplaza a Madrid para estar cerca del único miembro de su familia que le queda, su hermana Hortensia. Esta se encuentra presa y embarazada, a la espera de una sentencia por colaborar con el bando republicano. Coqueteando con el cine de espías en sus primeros actos, “La voz dormida” se desvela como un drama que va en aumento, dejándonos empatizar con sus protagonistas, haciéndonos participes de sus sueños y esperanzas, para apretarnos donde más duele, hasta dejar que nos ahoguemos en un mar de lágrimas. El guion, basado en la novela de ficción del mismo nombre escrita por Dulce Chacón, es particularmente inquisitivo con el papel de la iglesia en esa purga de contestatarios del régimen en aquel periodo de postguerra. El director de la cinta, Benito Zambrano, está especialmente inspirado al llevarnos a esa época y hacernos vivir este drama. Aunque en esa labor también hay que dar mérito a la espléndida labor de María León e Inma Cuesta dando vida a esas dos sufridas hermanas.
Director: Benito Zambrano Guión: Benito Zambrano, Ignacio del Moral, Dulce Chacón Música: Magda Rosa Galván, Juan Antonio Leyva Fotografía: Alex Catalán Intérpretes: Inma Cuesta, María León, Marc Clotet, Daniel Holguín, Ana Wagener, Antonio Dechent, Javier Godino, Teresa Calo, Jesús Noguero, Miryam Gallego, Begoña Maestre, Fermí Reixach
España | 2011 | 128 minutos | Drama | Posguerra española | Años 40 |