Spider-Man: No Way Home (2021)

En tiempo de pandemia hemos tenido distintas pelis que han llegado con la promesa de hacer volver al gran público a las salas de cine. Con mayor o menor éxito, está claro que ninguna ha conseguido una taquilla como las de prepandemía. Bueno, hasta esta sobredosis de Spider-Man. “No Way Home” es la tercera peli del Spider-Man dirigida por Jon Watts, protagonizada por Tom Holland y enmarcada en el MCU. Después de dos entregas que me dejaron un muy buen sabor de boca, y un rifirrafe entre Marvel y Sony que puso momentáneamente en duda su producción, finalmente esta que nos ocupa ha sido una cinta diseñada y orquestada como todo un evento cinematográfico, poniendo unas expectativas muy altas entre todo el fandom. Y ya en el cine, el mismo día del estreno, se veía que la apuesta les había salido ganadora.

Pero entre el entusiasmo que fácilmente percibí en la sala, mi sensación era de decepción. Sorprende ver como el multiverso, que fue un invento para intentar dar una explicación y coherencia a un sindiós de historias en los cómics, ahora sirve en el cine para dar gustito a los fans… una escena sí y otra también. Fanservice multigeneracional, que era el gran aliciente ya desde la campaña de promoción. Una promesa que se cumple como un sueño húmedo de adolescente, pero que también es el gran lastre de la película. Me deja perplejo hasta que nivel han llegado, me da vergüenza ajena el descaro con el que se ha abusado del fanservice. No estoy hablando de que hayan colado algún detalle que solo los muy fans podrían detectar, es que más de la mitad de la peli son guiños colados con calzador, de forma descarada, tirados a la cara del espectador a lo bruto, puro auto emplazamiento publicitario, casi sin pausa, sin explicación y sin importar que la película pierda todo su sentido. Cada personaje que viene de otro universo se siente fuera de lugar, sin nada real que aportar a la trama ni a su relación con los demás, llegados literalmente a través de un portal dimensional. Lo único que tienen en común es que están invitados a esta extraña reunión de viejos conocidos del público. Escenas sin sentido, conversaciones que no vienen a cuento y solo sirven para alargar la peli hasta más allá de las 2 horas y media, y cortar su ritmo. Un guion que se plaga de excusas para llevar a los personajes a la siguiente escena excita fans.

Pero, como ya digo, el objetivo se ha cumplido con creces. Primero por los aplausos y voces de asombro que pude escuchar en el cine, y más importante, por los estratosféricos datos de taquilla. Me parece que esta peli sienta un peligroso antecedente, anteponiendo a un criterio riguroso y serio a la hora de confeccionar una cinta. Una película no puede deberse al 100% a los fans porque si no sale esto, el típico capitulo especial de reencuentro de una sitcom, con argumento forzado y chapucero, que se olvida de la coherencia en el camino. Algo que obviamente ya sabían, por eso el nudo de la trama es irrelevante para el universo Marvel, o al menos eso parece. Auguro que si los grandes estudios no logran interpretar correctamente lo que ha ocurrido con “Spider-Man: No Way Home” y se lanzan a repetir su formula, en unos años este mega éxito será recordado como el principio del fin de este tipo de cine. Lo que vendrá después será una especie de “Rewind MCU”, “Rewind Star Wars”, “Rewind Harry Potter” o vete a saber qué.

Y aun con todo, con esta profunda decepción que me he llevado, a duras penas, eclipsado por las autorreferencias, pausando durante minutos la trama que interesa… pero el conjunto se mantiene. “Spider-Man: No Way Home” me parece una buena película gracias a los personajes del universo actual que nos ocupa, desde el Spider-Man de Tom Holland a la MJ de Zendaya. La pena es que podía haber sido aun mejor.

Director: Jon Watts Guión: Chris McKenna, Erik Sommers, Steve Ditko, Stan Lee Música: Michael Giacchino Fotografía: Mauro Fiore Intérpretes: Tom Holland, Zendaya, Benedict Cumberbatch, Marisa Tomei, Jacob Batalon, Jon Favreau, Angourie Rice, Alfred Molina, Jamie Foxx, J.K. Simmons, Thomas Haden Church, Rhys Ifans, Harry Holland, Christopher Cocke, J.B. Smoove, Hannibal Buress, Martin Starr, Tony Revolori

Estados Unidos | 2021 | 148 minutos | Acción | Ciencia ficción | Fantástico | Superhéroes | Secuela | Cómic | Marvel Comics |