Psychonauts 2 (2021)

Tim Schafer es un veterano de la industria del videojuego que ya desde sus inicios pudo dar rienda suelta a su ingenio como guionista en algunas de las exitosas aventuras gráficas de LucasArts en los 90. Ya con un puesto asentado en la compañía, LucasArts cambió sus prioridades viendo que las aventuras gráficas habían pasado de moda. Tim y otros compañeros decidieron salir de allí en el año 2000 para crear su propio estudio, Double Fine, que comanda desde entonces. “Psychonauts” se convirtió en el primer juego del nuevo estudio, que, 16 años después, consigue su continuación.
“Psychonauts 2” vuelve a repetir en el género de plataformas y acción, pero sin olvidarse de contar una historia. Y este último punto toma un peso especial porque viviremos una aventura salida de la mente de Tim Schafer. Su labor como guionista es magnifica, y el resultado aquí es de película. El estilo y artes del juego destilan una personalidad única, con un excelente argumento de comedia, giros imprevistos, y un montón de personajes carismáticos. Las sorpresas también llegan cuando vemos que las fases del juego transcurren en la mente de alguno de sus personajes. Así, el juego hace buen uso de metáforas para explicar los procesos psicológicos de los personajes, y para dar vida a las distintas ambientaciones, todas un delirio de originalidad. Ahí dentro cualquier cosa es posible, pero sin perder el sentido del argumento. La loca imaginación de sus responsables sin duda que está a la altura.
Se nota que aquí sigue vivo el espíritu descacharrante de las aventuras gráficas de LucasArts de hace décadas. En lo jugable, en los diálogos y la búsqueda y uso de objetos, pero también en el resto de aspectos del juego, con un acabado mucho más cinematográfico que entonces. Solo hay que ver ese apartado gráficos prácticamente de película de animación, o la música, entre la que se incluyen varios temas originales cantados. Vaya, como toda una película de animación de Hollywood. Por cierto, la banda sonora es obra de Peter McConnel, acreditado en esa misma labor en juegos de LucasArts y Double Fine desde hace 30 años.
Sin embargo, la jugabilidad del título consiste principalmente en sortear plataformas controlando a nuestro pequeño personaje. Entre las fases encontramos que la mayoría de tramos lineales, pero también zonas de exploración libre, eso sí con una variedad constante. Lo que es común a todas es que están todas muy bien ideadas, y proponiendo mecánicas originales que se entremezclan con su fabulosa ambientación. Realmente no he encontrado ninguna fase que baje el nivel, o que parezca relleno, y me es difícil quedarme con alguna por encima de las demás. Simplemente me parecen todas un prodigio de la originalidad, jugable y artísticamente.
El plataformeo solo se ve interrumpido por las chistosas conversaciones y por las peleas con enemigos. Durante el trascurso del juego conseguiremos hasta 9 habilidades que podemos asignar libremente a los 4 botones superiores del mando, y que necesitemos para avanzar por nuevas zonas, dando bastante variedad, y un cierto componente metroidvania, ya que para conseguir todos los coleccionables tendremos que volver a explorar niveles anteriores con las nuevas habilidades. Aunque como ya digo, es un extra, y la linealidad de mucha de estas fases no invita especialmente a revisitarlas. Además, no son fases precisamente cortas, y ya de primeras nos suelen llevar un buen rato explorarlas concienzudamente.
Por otro lado, la jugabilidad conserva ciertos elementos de las aventuras gráficas, como las conversaciones, o la búsqueda y uso de objetos. Reconozco que son toques muy sutiles, pero creo que enriquecen el espíritu aventurero del juego.
Si hay que buscarle un punto débil al juego ese es el combate con enemigos. Los veía como incomodas interrupciones en la exploración de las fases, a excepción de los geniales jefes finales. Aun así, reconozco que los pocos enemigos regulares se integran inteligentemente en el lore del juego, y están bien diferenciados y adaptados a las habilidades que obtenemos durante el juego. Como ya he dicho, los jefes son una cuestión aparte. En estos sí que vemos brillar el talento e imaginación que destila Double Fine, y suelen ser un brillante colofón a las fases.
Por último, “Psychonauts 2” es un juego muy fácil, demasiado para mi gusto. De esta forma el juego invita a disfrutar sin estrés del viaje que nos tiene preparado. La única exigencia la encontraremos si queremos encontrar todos los coleccionables.
En definitiva, “Psychonauts 2” me ha sorprendido muy gratamente. Es un plataformas con mucha narrativa, que se nota que ha salido de la mente de un tipo creativo y con mucha, muchísima imaginación. Además, para ser de un pequeño estudio, Double Fine pone todos los medios para presentar el juego como se merece una superproducción. Bravo Tim Schafer, te ha salido un juegazo.
Desarrollador: Double Fine Guión: Tim Schafer Música: Peter McConnell Intérpretes: Richard Steven Horvitz, Carson Annable, Krizia Bajos, Poonam Basu, Jack Black, Steve Blum, Kimberly Brooks, Darin De Paul, Zehra Fazal, Kate Higgins, Amber Hood, Erika Ishii, Nick Jameson, Grace Kaufman, David Kaye, Josh Keaton, Stephanie Komure, Alexis Lezin
Estados Unidos | 2021 | 23 horas | Videojuego | Acción | Aventura | Collectathon | Plataformas | Vista en tercera persona trasera | Gráficos 3D | AA |