
Telling Lies (2019)
Una forma extraordinariamente original de contar una historia

Una forma extraordinariamente original de contar una historia

Un regreso igual de absurdamente divertido, pero al menos más lógico

Ese singular potencial de diversión, sea cual sea el hardware

Una jugabilidad fresca con la que olvidar “Candy Crush”

Como un novato en juegos de exploración

Romper las reglas

Originales paradojas e ilusiones ópticas

Inquietante plataformas cinemático

Un run and gun con mucho arte

Montar en bicicleta a vista de pájaro

5 segundos pueden hacerse muy largos

Sensaciones interactivas

Arte jugable

El simple y puro placer de ordenar

La satisfacción del orden

De un lado a otro mientras te cuentan una historia

Explorar es un placer sin estrés

Toda la esencia de la exploración jugable

El poder de la narración

Estrategia y puzzle

Una pequeña gran historia oculta

Un perturbador viaje sensorial

Dejen paso al rey del yo contra el barrio

Como un puzzle ideado por John Woo

Acción y estrategia

Copias de copias de copias

Inspiración local

Un nuevo planeta por descubrir… y en el que sobrevivir

Y el narrador explica que como Stanley entra por la puerta izquierda

En lugar de saltar, explotamos

Buscar y leer notas

Muy machaca

Una lógica propia

Un juego de cartas rogue like

Soporífera experiencia

Ideando y construyendo estructuras

Un LP jugable

Abrumador aburrimiento

“Contra” vive en cada uno de sus pixeles

Roguelike con metridvania

El mejor videojuego de investigación

La isla del eureka

Un muy original juego de combates tácticos

Un metroidvania encubierto

El azote del vecindario

Un plataformas perfecto

Adiós al stress

El metroidvania más inteligente

Comandante estelar

El germen del boom indie

Desbordante y loca imaginación

La virtud de la simplicidad

Simple, bonito y original

Conectan y desconectan

Un roguelike con mucho ritmo

La obra cumbre en el género metroidvania

Puzzles y solo puzzles

Novela visual romántica e interactiva

Simplifica todo su potencial

Nada sobra y nada falla